domingo, 16 de septiembre de 2012

La Muerte

Vuelvo a publicar yo, Inés, porque hoy es un día especial a pesar de que este relato debería haber sido publicado hace 2 años, cuando fue escrito. Espero que os guste.


-¿Por qué haces esto? –preguntó entre sollozos -¿No te das cuenta del daño que haces?
Y entonces, por primera vez, la Muerte entendió. Y, en silencio, se marchó al mismo sitio donde enviaba a todo aquel que visitaba. Un lugar lejano, misterioso, donde la vida adquiría un significado distinto. Un lugar incomunicado, accesible tan solo por el recuerdo. No vaciló, no miró atrás. Caminó con paso firme y decidido, sometiéndose por fin a su propio destino.

Aquel fue el día en que la Muerte murió. Y,a partir de entonces el mundo vivió eternamente.

A mi abuelo. Porque a pesar de estos dos años, te sigo sintiendo vivo.

viernes, 7 de septiembre de 2012

Existencia

Hola a todos! :) Vuelvo a publicar yo, Inés, porque Patri está vaga, y digo yo que ya va siendo hora de volver a retomar esto de escribir :P Aquí os dejo un relato que escribí hace 2 años y que, no sé muy bien por qué, aún no había publicado.

Alzó la voz, carraspeó para aclararse la garganta y afirmó, de modo tajante:

-No existimos. Ninguno de nosotros. Nadie. Nada de lo que nos rodea es real. No somos más que una efímera ilusión, un sueño, un reflejo de un mundo demasiado complejo como para que podamos entenderlo. Y, además, no somos libres: cada uno de nosotros es esclavo de los movimientos y actos de un individuo al cual nos parecemos.


Los oyentes lo miraron sorprendidos. Habían escuchado atentos, callados, pensativos, hasta que el hombre dio su discurso por acabado. El silencio se hizo, pero tras unos segundos de pausa, que parecieron anunciar el esperado cambio en sus mentalidades, todo volvió a la normalidad. Nadie entendió sus palabras, la rutina comenzó de nuevo y la gente de los Espejos volvió a sus andadas.



A todo aquel que, en ocasiones, mire más allá.